El jardín de Floridablanca se encuentra en la zona más histórica del Barrio del Carmen, vecino de la propia Iglesia del Carmen. Fue construido en el s. XVIII, y es el primer jardín público que se abrió en España.
Debe su nombre al político, jurista y economista José Moñino Redondo, Conde de Floridablanca; fue ministro al servicio del rey Carlos III. El jardín se cierra con su verja en 1786, creando un entorno de características románticas, que se ha querido mantener erigiendo en su interior esculturas que homenajean a artistas murcianos como el escultor Antonio Garrigós o los poetas Selgas y Jara Carrillo.
En abril de 1900, en pleno auge de las exposiciones universales, Murcia crea su propia exposición en este jardín: “Exposición Agrícola, Industrial y Minera”.
El 1 de enero de 1848 se erige la estatua al Conde Floridablanca que preside el jardín.
En su interior destacan sobre todo sus increíbles ficus centenarios, auténticos monumentos naturales como los que podemos ver también en la plaza de Santo Domingo.
En el interior del jardín se encuentra uno de los pocos monumentos franquista que quedan en la ciudad de Murcia. Se trata de un monolito que conmemoraba la toma de esta plaza el 31 de marzo de 1939 por parte de la IV Brigada de la División de Navarra.
No hace muchos años el monolito fue manipulado y ya no se lee la inscripción original.
En una de las entradas al jardín se encuentra la Portada del Matadero Viejo, trasladada allí en 1948. Procedente de la cercana Plaza de la Paja donde se encontraba el matadero dela ciudad.
